En un aula de Educación Secundaria, Bachillerato o Formación Profesional, nos podemos encontrar con diversas características entre los alumnos. Como regla general, debemos mejorar la vía de actuación para atender a la diversidad, siempre que sea, en el aula ordinaria.
En la sociedad y en las aulas, nos encontraremos con grupos heterogéneos, diversos y en donde es posible una actuación que permita el intercambio, el aprendizaje mutuo, el planteamiento y la resolución de conflictos. En conclusión, la educación y la formación para ejercer una ciudadanía crítica y responsable.
Debemos entender que no hay alumnos irrecuperables, que todos pueden progresar si tienen una atención adecuada. El progreso en el aprendizaje no depende tanto de capacidades innatas predeterminadas, sino de la calidad y cantidad de aprendizajes realizados. La clave es la coordinación del profesorado y de éste con las familias. El aprendizaje es básicamente el resultado de la interacción social y por tanto depende en gran medida de las relaciones interpersonales y del clima afectivo. No puede haber aprendizaje si lo que va a aprender está muy cerca de lo que se sabe o demasiado lejos y por tanto es necesario conocer el punto de práctica de cada alumno y valorarlo en función de sus progresos.
Para ello vemos diferentes actuaciones que ayudan a esta atención a la diversidad.
- La estructuración de la clase en grupos heterogéneos, que funcionan de manera cooperativa e interactiva.
- La negociación con el alumnado sobre los temas a trabajar.
- Cuanto más variados sean los materiales curriculares empleados, más información transmitiremos, más tipos de actividades propuestas y de más recursos disponemos.
- Debemos hacer consciente al alumno de su propio proceso de aprendizaje, aclarando desde el principio los criterios y estrategias de evaluación.
- Practicar una evaluación continua, formativa y orientadora, basada en los procesos personales de cada alumno.
- Realizar una acción tutorial individualizada, para conocer mejor al alumno y planificar estrategias que le permitan avanzar.
- Colaborar con las familias, mediante entrevistas y reuniones periódicas para conocer mucho mejor las circunstancias de partida del alumno. También planificar actuaciones conjuntas con la familia para mejorar rendimientos y aclarar expectativas.
- Plantearse objetivos posibles, contenidos básicos y actividades significativas como ayuda en esa tarea.
- Contar con profesionales de apoyo: profesores de PT, especialistas de audición y lenguaje, psicólogos y pedagogos, trabajadores sociales, etc.
La Enseñanza Secundaria Obligatoria debe ofrecer a todos los alumnos las mismas posibilidades para continuar con el Sistema Educativo. Los itinerarios deben plantearse a medida de estas diversidades para atender a sus diversidades y compensar sus desigualdades.









